Tuesday, June 26, 2007

Terra Maria's Roots / Las raíces de Terra Maria


I just got back from a short trip to Saint Mary’s County in the South of Maryland. There, in 1634, the first Catholic English colonists arrived in search of the religious freedom they did not have in England, a country at that time ruled by an intolerant Protestant monarchy. They arrived after a long trip in a wooden boat -that for today’s standards looked like a tiny thing. I can only imagine the surprise these settlers felt while observing the natural beauty of the place; they probably thought they had found Paradise in Terra Maria [the region’s official name at the time].

The beautiful Chesapeake Bay with its forests of giant pines, oak, and hickories; vast marshlands and meadows of edible roots, seeds, and grains; clams, oysters, and crabs; huge turtles; 800-pound sturgeon and great schools of shad and striped bass; thousands of ducks, and swans; and flocks of passenger pigeons so large they darken the sky; all that scene in front of the eyes of people coming from a country which had alienated and mistreated them.

Most of them came from absolute poverty; to be owners or having the chance to own a piece of land was the maximum to what they could aspire. While living here, their living conditions were extremely austere to say the least; their home was a one-room cabin that served as dining-room, bedroom, and everything else. Bed posts did not exist in this area until a couple of decades later; therefore, they would sleep on the floor on top of straw-filled pillows. Nothing went to waste; everything was utilized, including old clothes used as house building material, among other things. In Maryland there was plenty of liberty to practice any religion, and the laws set in place not long after the settlers arrived are representatives of an egalitarian system that made no distinction between nobility and laborer. Respect was given to hard work on the land in order to produce tobacco and corn. These people arrived with two empty hands and with the wish to make a living through hard work. Does it sound familiar? This is the origin of this part of the USA and circumstances have not changed much on this respect…

While I was walking around and talking to historians who dedicate years to study the different people who lived in Saint Mary in order to re-enact them later, including up to the most minimum detail, like the accent when they speak, for example, I remembered what Tomás has been talking about on his blog lately; the cultural characteristics of the USA: lack of class differences, strong work ethics, and a special intolerance to lying … Of course! Cultural roots determine part of the future; each action has a unique consequence. At least, for a brief time, while I walked among the oaks and hickories, I felt all the pieces in a large jigsaw coming together and everything made sense, until I went back to Baltimore and saw the news on television.

SPANISH

Acabo de volver de un viaje corto al condado de Saint Mary al Sur de Maryland. Allí en 1634, los primeros colonos católicos ingleses llegaron en búsca de la libertad religiosa que no les era permitida en Inglaterra que en esos momentos era gobernada por una intolerante monarquía protestante. Llegaron después de un larguísimo viaje en un barco de madera –que bajo los estandares actuales parece una cosita sin importancia. Tan sólo me puedo imaginar su sorpresa al observar la enorme belleza natural del lugar; seguramente pensaron que habían encontrado el paraíso en la Terra Maria [nombre oficial de esta región en ese tiempo].

La hermosa Bahía de Chesapeake con sus pinos, robles y nogales gigantes; pantanos enormes y prados donde crecían en forma abundante todo tipo de tuberculos comestibles, semillas y granos; almejas, ostras, y jaibas, tortugas gigantes; peces esturión de más de 350 kilos además de otras especies de muy buen sabor; además de miles de patos y cisnes, y palomas; toda esa escena espectacular en frente de los ojos de gente que venía de un país dónde se les había marginado y maltratado.

La mayoría provenían de la pobreza material más absoluta. El ser dueños, o en vias de ser proprietarios de un pedazo de tierra, era lo máximo a lo que podían aspirar. Y ya estando acá, las condiciones en las cuales vivían eran paupérrimas por decir mucho; la vivienda era una cabaña con una pieza que servía de comedor, dormitorio, y todo lo demás. Las camas no existíeron en esta zona hasta un par de décadas posteriores; asi dormían en el suelo encima de un colchón hecho de paja. Nada se desperdiciaba; todo se utilizaba, incluyendo la ropa vieja que se ocupaba en la construcción de casas, entre otros. En Maryland, existía libertad plena para practicar cualquier religión, y la leyes que se instauraron al poco tiempo de la llegada de los colonos hablan de un sistema igualitario dónde no se distinguía entre nobleza y peón; lo único que se respetaba era el deseo de trabajar la tierra para producir tabaco y trigo. Esta gente llegó con sus dos manos vacías y con las ganas de ganarse la vida trabajando, suena familiar, no? Ese es el origen de esta parte de USA y las circunstancias en este respecto no han cambiado mucho …

Mientras visitaba estos lugares y conversaba con los historiadores que se dedican por años a estudiar los distintos personajes que vivieron en la ciudad de Saint Mary para empersonarlos posteriormente cubriendo hasta el más mínimo detalle como el acento al hablar por ejemplo, me acordé de lo que Tomás ha estado comentando en su blog ultimamente acerca de las características culturales de USA: la falta total de diferencia de clases; una ética muy fuerte con respecto al trabajo; e intolerancia a la mentira … Claro, las raíces de una cultura determinan parte del futuro; cada acción tiene su consecuencia única. Por lo menos, por un breve lapso mientras caminaba entre los robles y nogales enormes sentí que todas las piezas de un gran rompecabeza se unían perfectamente y todo tuvo sentido, hasta que volví a Baltimore y ví las ultimas noticias en televisión.

6 comments:

Tomas Bradanovic said...

jajaja, la tele te volvió a poner los pies en la tierra!

En todo caso siempre hay un sustrato de eso en las costumbres de la gente, esas son las buenas costumbres. Es mejor ni pensar en las consecuencias morales porque todo tiene sus luces y sus sombras.

Fíjate en la historia de América latina con las guerras de los Pizarros contra Almagros, las traiciones, ¡las guerras de los cristeros en Mexico terminaron recién en los años 20! Comparadas con la colonización norteamericana parece algo muy caótico.

Pero todo tiene su cara y sello, son diferentes formas de apearse del caballo nomás: unos por la cola, otros por el estribo. Cada cual con sus ventajas y desventajas.

Anonymous said...

Hola Lilian:
Con razon que no te banaste los dos dias de camping que fuiste a la bahia... aguita v/s historia..., me quedo con el aguita.
Interesante lo de la Terra Maria = Maryland in English :o)

Lilian said...

Tomas,

Te estaba dejando un mensaje en tu blog mientras tu me dejabas uno en el mio :o) Lo que dices es absolutamente cierto y siempre existe la otra cara de la moneda incluso para esos legados culturales que parecen beneficiosos. En este caso menciono la igualdad social y la ecuanimidad judicial y religiosa; asi como tambien el gran respeto que se tiene al trabajo intenso. Con respecto a este ultimo, es comun aunque ya esta cambiando la cultura en este aspecto [probablemente por la intensa inmigracion hispana]que la gente trabaje toda sus vidas -sin vacaciones, sin mucho tiempo libre para disfrutar de la vida- para jubilar y morirse un anho despues! [eso es una de las consecuencias nefastas de este apego tan grande al trabajo]

Anonymous,

Fueron tres dias y me banhe una sola vez [en la ducha]; solo para aclarar :o)

Anonymous said...

Que divertido, 3 dias y un solo dia te banaste en la ducha?, supongo que despues fueron banos de sol solamente... que rico!.
Lis

Anonymous said...

Pobre Marido ? o fuiste sola?

Lilian said...

Anonymous,

Funny! :oP

PS: Me dejaste curiosa... Sue? Andrea? Who are you?